Minaya cuenta con suficiente patrimonio como para, desde y a través de él, poder contar nuestro pasado.
Aún así, es mucho el patrimonio desaparecido, unas veces por desconocimiento y otras por falta de interés en su conservación.
Minaya es un municipio construido quizás sobre antiguos poblados romanos. Son muchos los estudiosos que ubican a la antigua Laminio o la posterior Minar (Ninar) en la actual Minaya. Es probable que los pasadizos encontrados en el casco antiguo sean más redes de desagüe de época romana que pasos secretos.
Muchos de los arcos de piedra, por ejemplo, que adornaban las casas o las antiguas fondas han ido a las escombreras.
El rulo de San Antón, que todas las personas mayores de cuarenta años seguro recordáis, era parte del "rollo" del pueblo y ha desaparecido después de su paso como pedestal del Beato. De las tres ermitas existentes, tan solo quedan dos. La de San Sebastián en el actual cementerio y la de San Antón, antes era la Ermita de la Concepción. La tercera ermita se encontraba en la cercanía del parador frente a las eras del "rollo"
De las fondas y ventas tan solo quedan algunos datos y el parador que por suerte, y gracias a la inversión privada, aún se mantiene en pie.